El 8 de septiembre de 2024 será un día histórico en el mundo del deporte. Una ceremonia especial marcará el final de los Juegos Olímpicos de París y el comienzo de una nueva era para Los Ángeles, ciudad que tendrá el honor de ser la sede de la competición en 2028. Será un momento lleno de emoción y orgullo para los habitantes de la ciudad y para todos los amantes del deporte en general.
Los Ángeles ha sido elegida como la sede de los Juegos Olímpicos en cuatro ocasiones anteriores, en 1932 y 1984 para los Juegos de verano, y en 1960 y 1984 para los Juegos de invierno. Ahora, en 2028, volverá a ser el centro del mundo durante dos semanas, acogiendo a los mejores atletas del planeta en una competición que reúne a cientos de países y millones de espectadores en todo el mundo.
Este día también marcará el fin de un capítulo en la historia de los Juegos Olímpicos. París se despide después de haber albergado la competición por tercera vez, con una organización impecable y unas instalaciones de primer nivel que han sido alabadas por todos los participantes. Los Ángeles tomará el relevo con el objetivo de superar todas las expectativas y hacer de estos Juegos una experiencia inolvidable para todos.
La ceremonia de cambio de sede será una celebración del deporte, de la amistad y de la unión de los pueblos. Los mejores atletas de París y Los Ángeles se reunirán en el Estadio Olímpico, donde se llevará a cabo la ceremonia de clausura de los Juegos de 2024. Allí, pasará el bastón olímpico de manos parisinas a manos angelinas, en un gesto que simboliza la continuidad de la competición entre dos ciudades que tienen una gran historia con los Juegos Olímpicos.
Pero este día no solo marcará el inicio de una nueva sede, sino que también servirá como un recordatorio del verdadero espíritu olímpico. Los Ángeles ha demostrado su compromiso con el medio ambiente y la sostenibilidad, con un plan para reducir las emisiones de carbono en un 45% para 2024, y ser completamente neutral en carbono para 2028. Además, la ciudad también ha prometido utilizar instalaciones ya existentes y temporales, en lugar de construir nuevas instalaciones costosas y que no serán utilizadas después de los Juegos.
Los Ángeles también ha mostrado su compromiso con la inclusión y la diversidad, con un plan para promover la igualdad de género, la inclusión de minorías y la accesibilidad para personas con discapacidad en los Juegos. Además, la ciudad también se ha comprometido a dejar un legado para la comunidad después de la competición, utilizando los Juegos como una oportunidad para mejorar la calidad de vida de los residentes locales.
La elección de Los Ángeles como sede para los Juegos Olímpicos de 2028 no solo es un reconocimiento a la ciudad y a su historia con los Juegos, sino también una oportunidad para mostrar al mundo su capacidad para organizar un evento de esta magnitud y su compromiso con los valores olímpicos. Será una ocasión para que la ciudad se luzca ante el mundo y demuestre todo lo que tiene para ofrecer.
Y no podemos olvidar mencionar la importancia de estos Juegos para el deporte en sí. Los Ángeles es una ciudad donde el deporte es un estilo de vida, con equipos profesionales en las principales ligas y una cultura de fitness y bienestar muy arraigada. La celebración de los Juegos Olímpicos en esta ciudad será una oportunidad única para promover el deporte y motivar a las futuras generaciones a practicar actividad física